Cleansing Oil de Sarah Becquer, el limpiador facial para todo tipo de pieles

 

Nunca me cansaré de decir que uno de los pasos fundamentales para tener un rostro sano es la limpieza facial. Es por ello que en mi tocador cuento con varios productos limpiadores de diferentes tipos entre los cuales se encuentra Cleansing Oil de Sarah Becquer, el cual se ha convertido en uno de mis favoritos y que estoy convencida que después de que lo conozcas vas a querer probarlo, pues una de sus grandes cualidades, entre muchas otras, es que es un limpiador para todo tipo de pieles. ¿Suena bien verdad? Así que ¡Vamos a conocerlo!

Sarah Becquer es una marca de cosmética española bastante joven creada por la farmacéutica Mar Sieira, la cual está basada en el poder de los aceites vegetales. La filosofía de sus productos es "transformar el gesto más cotidiano en un momento sublime, y así, convertir la rutina del cuidado de la piel, en un tiempo para deleitarnos con las sensaciones, aromas y texturas de nuestra dermocosmética natural y sofisticada". 

Sus productos, además de tener unas formulaciones muy completas con aceites botánicos, destacan por una estética muy femenina y delicada que no tiene nada que ver con los productos de farmacia al uso que conocemos. 

Después de esta pequeña pincelada sobre la marca, pasemos a conocer a nuestro protagonista de hoy. 

Cleansing Oil de Sarah Becquer - Un limpiador facial para todo tipo de pieles -

La marca nos dice que se trata de una fórmula natural a base de una mezcla de aceites vegetales cuidadosamente seleccionados, donde destacan el aceite de argán el cual es muy conocido por sus grandes propiedades hidratantes ya que contiene ácidos grasos y vitamina E; aceite de almendras dulces que es rico en grasas monoinsaturadas, ácidos grasos esenciales como el omega 3 y el omega 6 y jojoba, antioxidantes y vitamina E, y algunas vitaminas B como B1 y B6; aceite de jojoba que cuenta con una compleja composición con un 97% de ceramidas, lo que hace que resulte extremadamente estable al calor y a la oxidación conservándose perfectamente con el paso del tiempo y manteniendo íntegras sus propiedades, además tiene propiedades antimicrobianas, ya que  calma y desinflama la piel, eliminando las rojeces que aparecen en el rostro debido a sensibilidades cutáneas pasajeras producidas por eccemas o acné y por si todo esto fuera poco este aceite tiene propiedades antioxidantes y antienvejecimiento, ya que ayuda a  neutralizar los radicales libres.

Hablemos del Packaging de Cleansing Oil de Sarah Becquer

Cleansing Oil viene presentado en un frasco de cristal transparente y cuenta con una bomba dosificadora para facilitar la aplicación del producto. 

Esta disponible en dos formatos. Uno de 100 ml que es el de la fotografía anterior que tiene un precio de 39,90€ y otro de 50 ml en un envase de plástico con un precio de 24,90€. Lo puedes encontrar en la web de Sarah Becquer o en diversidad de farmacias y parafarmacias que distribuyen la marca. 

Discos Desmaquillantes de Bambú

Sarah Becquer también nos ofrece para completar nuestra limpieza facial estos discos desmaquilladores de bambú, que como su nombre lo indica, están confeccionados con bambú orgánico y microfibra que sirven para limpiar el rostro de manera suave y eficaz. Son ideales porque son reutilizables y se pueden meter en la lavadora sin problemas. De esta manera reducimos residuos y contribuimos con este pequeño gesto a cuidar un poco de nuestro planeta, además de que ya no tenemos que gastar dinero extra en los discos de algodón desmaquilladores. 

Mi experiencia con Cleansing Oil de Sarah Becquer

Como te he adelantado en la introducción, este aceite limpiador se ha convertido en uno de mis productos favoritos dentro de mi ritual de cuidado facial. Como su nombre lo indica, se trata de un aceite, aunque yo lo describiría un como un "híbrido entre aceite y gel", el cual es muy agradable de aplicar en el rostro. Se aplica sobre la piel seca con un suave masaje y luego ponemos un poco de agua y ahí surge la magia, ya que el producto se transforma en una emulsión que cuando la retiramos ya sea con agua, una muselina o un algodón de bambú, la piel queda suave, sin tirantez y lo que es más importante sin sensación de grasa.

Lo utilizo de dos maneras: como primer paso de la doble limpieza, es decir para desmaquillar el rostro y también como primer paso por las mañanas antes de aplicar mi tratamiento facial de día. 

¿Por qué es un limpiador para todo tipo de pieles? Te confieso que cuando una marca me dice que un producto es para todo tipo de pieles, soy un poco escéptica, ya que cada piel tiene unas necesidades muy concretas y es un poco difícil que un sólo producto consiga abarcarlas todos; sin embargo, ¡Sarah Becquer lo ha conseguido!, ya que ha sabido integrar en un sólo producto los ingredientes claves para que el limpiador le siente bien a una piel normal, a una mixta o grasa, a una sensible o a una seca. 

Si tienes la piel mixta o grasa, no vas a notar ni un ápice de grasa o residuo en tu piel cuando lo uses. Si tienes la piel seca no la vas a notar tirante y si la tienes sensible verás que es un limpiador nada agresivo con la piel. 

Otro tanto de interés es que este aceite limpiador, tiene un aroma suave y agradable muy característico entre todos lo productos de la marca. También me gustaría destacar que es un producto que cunde mucho, ya que con 4 pumps es más que suficiente para para limpiar de sobras todo el rostro.

Si estás buscando un producto eficaz y con una excelente fórmula, Cleansing Oil de Sarah Becquer es una gran opción a tener en cuenta, pues recuerda que la limpieza facial es fundamental para que la piel de tu rostro esté sana y se mantenga así a lo largo del tiempo. 

¿Cuál es tu limpiador facial por excelencia? ¡Déjame un comentario para conocerlo!